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Educación 

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Leonardo Da Vinci

y Miguel Ángel

El Museo del Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México es el escenario elegido para  exhibir  las obras de dos grandes exponentes del arte y reconocidos artistas a nivel mundial; se trata de Leonardo Da Vinci y Miguel Ángel.

 

 

Museo de Bellas Artes de México. Foto: Emilsen Ocampo Arenas

La exposición pictórica y escultórica que por primera vez se presenta en este país generó gran aceptación del público en general, quienes acudieron masivamente al lugar para observar de cerca las imponentes y bellísimas obras de arte de la época del renacimiento, periodo comprendido durante los siglos XV y XVI. 

 

Para comprender  la importancia de la creación artística de Da Vinci y Miguel Ángel es necesario hacer una síntesis sobre los aportes a la cultura universal, la vida de cada uno de los artistas y los conceptos relacionados con el arte.

 

"El arte (tekhné) es una disposición susceptible de mover al hombre a hacer una creación, acompañada de razón verdadera", escribió Aristóteles. Sus reflexiones sobre el arte abarcan tanto al pintor como al arquitecto, el poeta y el tapicero, el carpintero y el tirador con arco. No existe pues distinción entre artista y artesano, ni separación en el seno de la producción social entre objetos técnicos y objetos de arte. En la antigüedad y en las sociedades tradicionales se  reconocía el talento artístico de ciertos creadores y se apreciaba la belleza de las obras de arte. 

 

En su sentido primigenio, el arte manifiesta una actividad mental, un conocimiento. La creación artística se diferencia de la creación natural, en que la habilidad se opone a la inspiración y la regla sustrae el arte a la rutina. Estas relaciones entre el arte y el saber se prolongan a través de la Edad Media con la distinción entre "artes liberales", que apelan a la libertad de espíritu (Gramática, Retórica, Dialéctica, Geometría, Música Aritmética, Astronomía), y "artes mecánicas", es decir, manuales, que no requieren conocimientos profundos. El Renacimiento rompería esta alianza para Leonardo da Vinci, 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Michelangelo di Lodovico Buonarroti Simoni, “El Divino” nació el 6 de marzo de 1475 en Caprese, Italia y murió el 18 de febrero de 1564 en  Roma, Italia.Conocido en español como Miguel Ángel fue un arquitecto, escultor y pintor italiano renacentista, considerado uno de los más grandes artistas de la historia. Desarrolló su labor artística a lo largo de más de setenta años entre Florencia y Roma. Triunfó en todas las artes en las que trabajó caracterizándose por su perfeccionismo. 

 

La escultura, según había declarado Miguel Ángel, era su predilecta y la primera a la que se dedicó. Comenzó sus estudios el 1 de Abril de 1488 con doce años de edad. Comenzó como aprendiz de Doménico y Davide di Tomaso di Currado; allí inició una década de gran intensidad artística; después del Bacus del Bargello 

(1496) esculpió la Piedad del Vaticano a los veintitrés años;  a los treinta, fue acreditado como un artista de primera línea.

 

Entre 1516 y 1530 se ocupó de  proyectos como realizar la fachada de la Basílica de San Lorenzo de Florencia, trabajo que en el año 1520 debió abandonar. Construyó la Sacristía Nueva de San Lorenzo y la Biblioteca Laurenciana. Fue nombrado «Gobernador y Procurador General de la fabricación y fortificación de las murallas». Aceptó el encargo de Clemente VII para trabajar en el altar de la Capilla Sixtina y entre 1536 y 1541 realizó el magnífico Juicio Final. Hasta el año 1550 fue haciendo obras para la tumba de Julio II y los frescos de la Capilla Paulina.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Leonardo Da Vinci nació el 15 de abril de 1452, en  Vinci, Italia y falleció el 2 de mayo de 1519 en Amboise, Francia. Fue un polímata florentino del Renacimiento italiano, pintor, anatomista, arquitecto, artista, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, poeta y urbanista.

 

Descrito como el arquetipo y símbolo del hombre del Renacimiento, genio universal, además de filósofo humanista cuya curiosidad infinita solo puede ser equiparable a su capacidad inventiva, Leonardo da Vinci es considerado como uno de los más grandes pintores de todos los tiempos y posiblemente es la persona con el mayor número de talentos en múltiples disciplinas que jamás ha existido.

 

 Como ingeniero e inventor Leonardo desarrolló ideas muy adelantadas a su tiempo, tales como el helicóptero, el carro de combate, el submarino y el automóvil. Muy pocos de sus proyectos llegaron a construirse (entre ellos la máquina para medir el límite elástico de un cable), puesto que la mayoría no eran realizables durante esa época. Como científico Leonardo Da Vinci hizo progresar mucho el conocimiento en las áreas de la anatomía, la ingeniería civil, la óptica y la hidrodinámica.

 

Su asociación histórica más famosa es la pintura, siendo dos de sus obras más célebres La Gioconda y La Última Cena, copiadas y parodiadas en varias ocasiones, al igual que su dibujo del Hombre de Vitruvio. Únicamente se conocen veinte de sus creaciones y junto con sus cuadernos que contienen dibujos, diagramas científicos y reflexiones sobre la naturaleza de la pintura que constituyen un legado para las sucesivas generaciones de artistas, llegando a ser igualado únicamente por Miguel Ángel. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el plano artístico Leonardo conforma, junto con Miguel Ángel y Rafael, la tríada de los grandes maestros del Cinquecento, y, pese a la parquedad de su obra, la historia de la pintura lo cuenta entre sus mayores genios. Por lo demás, es posible que de la poderosa fascinación que suscitan sus obras maestras (con La Gioconda a la cabeza) proceda aquella otra fascinación en torno a su figura que no ha cesado de crecer con los siglos, alimentada por los múltiples enigmas que envuelven su biografía, algunos de ellos triviales, como la escritura de derecha a izquierda y otros ciertamente inquietantes como aquellas visionarias invenciones cinco siglos adelantadas a su tiempo. 

 

 

 

Las Musas. Arquitecttura exterior Museo. Fotos: Emilsen Ocampo Arenas.

El David Apollo de  Miguel Ángel. Foto: Museo Bellas Artes, México

Virgen de la Rueca y dibujos de caballos de Leonardo Da Vinci.

Fotos del Museo de Bellas Artes de  México.

Texto: Emilsen Ocampo Arenas

Fuente: Museo de Bellas Artes, Méxicco

Arte Prehistórico

Arte prehistórico son todas las formas gráficas, esquemáticas, siluetas y trazos  que formen figuras son considerados como obras de arte por los prehistoriadores.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Son varios los factores tenidos en cuenta en el arte prehistórico: las formas, los estilos, los materiales seleccionados, las pinturas usadas, el tipo de herramientas, el tamaño de las piezas mobiliares, las técnicas utilizadas  y la ubicación de los hallazgos; todos ellos son importantes para hacer un cálculo preciso de la época en que existieron las comunidades  que realizaron las obras de arte.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El estudio sobre los orígenes del arte es amplio y abarca los diferentes periodos prehistóricos, los cuales evidencian el tiempo y el espacio de las culturas, permitiendo la particularización de las características pertenecientes a cada una de ellas. Es así como los entendidos del tema, arqueólogos, antropólogos y etnógrafos pueden dar a conocer información valiosa sobre las culturas, los modos de vida, las estructuras de sus viviendas, los ritos funerales, el comportamiento de los artistas y el desarrollo y avance de las técnicas implementadas;  elementos que se reflejan en  sus representaciones rupestres. Para lograr la obtención de los datos sobre el arte prehistórico, la ciencia se ha valido de los conocimientos de áreas tecnológicas y equipos especiales y modernos para garantizar la autenticidad de los estudios y es muy importante resaltar,  el interés a nivel internacional para la protección y conservación de las obras, a través de programas de documentación  y sistematización de  la información compilada; la datación de las obras, en cuanto a componentes de soporte y de pigmentos, el análisis de los autores , referido a su estilo, trazos y formas que le da a su creación artística, la combinación de  temas y a la composición de las mezclas en las pinturas. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Igualmente con las metodologías de los prehistoriadores es posible distinguir el arte paleolítico, con abundancia de figuras de animales con trazos casi perfectos, mientras que las imágenes de humanos son deformes y en menor cantidad,  o las figuras del periodo mesolítico con escenas altamente vivas y descriptivas, o el arte progresivo presentado en el  neolítico, a raíz del  cambios de mentalidad y al auge de la  economía de ese momento.

 

Se  logra describir  las habilidades de cada cultura, lo que ayuda a diferenciarlas entre sí; de esa forma, la cultura Auriciense se reconoce por sus objetos de hueso y el arte con bajorrelive; el rasgo sobresaliente de la Cultura Gravetiense es la de la industria lítica, cuyas figuras humanas femeninas tienen exagerados  atributos sexuales y las bestias  predominantes fueron los renos y los mamuts; en contraste con la cultura Solutrense que destacó por sus avances técnicos y las nuevas formas de utilización de las herramientas y ,  de la Magdeleniense, caracterizada por la industria lítica y ósea. 

 

Los prehistoriadores consideran otros aspectos relacionados con el arte paleolítico, por ello se habla de  los cazadores de la época glacial, habitantes de Europa durante la segunda mitad de la última glaciación, por su contribución con las obras que realizaron y que fueron clasificadas en dos categorías: la primera, rupestres (cuevas) o parietales (rocas exteriores); la segunda, lo portátil o mueble. Pocas figuras humanas y las existentes son deformes,  la de los animales perfectas y la de los signos hermética: “lo fingido, lo real y simbólico”. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

De la evolución de los estilos y su cronología, etapa que comprende tres fases: la Fase Primitiva, que incluye estilos I y II y está identificada por figuras estáticas, simples, aisladas y con  pocos detalles internos; con trazos en el barro, hechos con dedos y manos, entre los años (33.000-18.000). La Fase Arcaica, con estilo III, cuyas obras manifiestan la corrección en las proporciones y perspectivas de las figuras, movimiento en las patas, rabos y cabezas de las imágenes  bestiarias y rellenos en el interior de las mismas. Esta fase está comprendida entre (18.000-13.500). La fase Clásica, estilo IV, se destaca por su gran desarrollo en los años (13.500-8.500). Se observa el estilo Vibrante y colorido, con profundidad espacial, volumen, plasticidad, el movimiento de las figuras y los detalles  en la combinación de los temas. 

 

En cuanto a la ubicación geográfica del arte prehistórico, este se concentra en Europa, en diferentes países: concretamente en la Península Ibérica, Francia, Portugal, Alemania, Italia, Rusia, suiza, Austria, Moravia, Ucrania, Baskiria y en el continente Africano. 

 

En general se puede determinar que el arte prehistórico proliferó en sus figuras, trazos y signos; en distintas técnicas de relieve, grabado, tallas y figuras; en dibujos esculpidos  sobre piedras y paredes y en figuras elaboradas con marfil, hueso y madera. Se encontraron paneles con imágenes de animales, dispuestos según la importancia que les otorgaba cada cultura y con atributos exclusivos en específicos lugares. 

 

Haciendo referencia a la significación del arte prehistórico y a las intenciones de los artistas se llega a posibles conjeturas respecto a la mujer como símbolo de la fecundidad, y a la hechicería en la búsqueda de protección grupal o para obtener buena cacería, sin embargo, estas apreciaciones son minimizantes si se tienen en cuenta otras consideraciones que indican que hubo migración estacional que supone ubicarse en un lugar por un tiempo en particular, además del intercambio de conocimientos, de recursos, de experiencias y de comunicación cultural, en sitios definidos para reunirse.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

        

 

 

 

Texto: Emilsen Ocampo Arenas

Fotos: Emilsen Ocampo Arenas. Tomadas de originales

de Julio Bech, Antropólogo y profesor Unam.

Fotos: Emilsen Ocampo Arenas. Tomadas de originales

de Julio Bech, Antropólogo y profesor Unam.

Fotos: Emilsen Ocampo Arenas. Tomadas de originales

de Julio Bech, Antropólogo y profesor Unam.

Fotos: Emilsen Ocampo Arenas. Tomadas de originales

de Julio Bech, Antropólogo y profesor Unam.

Fotos: Emilsen Ocampo Arenas. Tomadas de originales

de Julio Bech, Antropólogo y profesor Unam.

Barandián, Ignacio. (1996).

Historia  del Arte

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